Clasificación Antiinfecciosos.

1. Antibióticos:

- Betalactámicos: Incluyen las penicilinas, cefalosporinas, carbapenémicos y monobactámicos. Actúan inhibiendo la síntesis de la pared celular bacteriana.

- Macrólidos: Ejemplos son la eritromicina, azitromicina y claritromicina. Inhiben la síntesis proteica bacteriana.

- Quinolonas: Como la ciprofloxacina, levofloxacina y moxifloxacina. Actúan inhibiendo la enzima ADN girasa y la topoisomerasa IV bacterianas, interfiriendo en la replicación y transcripción del ADN.

- Tetraciclinas: Incluyen la doxiciclina y tetraciclina. Bloquean la síntesis proteica bacteriana.

- Aminoglucósidos: Como la gentamicina y amikacina. Inhiben la síntesis proteica bacteriana.

- Sulfonamidas y trimetoprima: Inhiben la síntesis de ácido fólico bacteriano, un componente esencial para la síntesis de ADN y ARN.

- Otros: Entre ellos se encuentran los glicopéptidos (vancomicina), estreptograminas (quinupristina-dalfopristina) y nitroimidazoles (metronidazol), que tienen diferentes mecanismos de acción.

2. Antivirales:

- Antirretrovirales: Utilizados en el tratamiento del VIH, incluyen inhibidores de la transcriptasa inversa, inhibidores de la integrasa y inhibidores de la proteasa.

- Antivirales de acción directa: Utilizados en el tratamiento de infecciones por virus de la hepatitis C, como los inhibidores de la proteasa y los inhibidores de la polimerasa viral.

 

3. Antifúngicos:

- Azoles: Como el fluconazol, itraconazol y voriconazol, que inhiben la síntesis del ergosterol, un componente esencial de la membrana celular fúngica.

- Equinocandinas: Ejemplos son la caspofungina y micafungina, que actúan inhibiendo la síntesis de la pared celular fúngica.

- Anfotericina B: Un polieno antifúngico que altera la integridad de la membrana celular fúngica.

 

4. Antiparasitarios:

- Antimaláricos: Incluyen la cloroquina, artemisininas y derivados de la quinina, que actúan sobre el parásito de la malaria.

- Antihelmínticos: Utilizados para tratar infecciones por helmintos, como los nematodos y cestodos. Ejemplos son el mebendazol, albendazol y praziquantel.

- Antiprotozoarios: Utilizados en infecciones por protozoarios, como el metronidazol para la tricomoniasis y giardiasis, y la pentamidina para la leishmaniasis.